Cerdo frito en sartén y más - 197 recetas de cocina

El cerdo frito es un plato sabroso, sencillo y asequible que cualquier ama de casa puede probar. Elige la mejor receta con fotos del paso a paso de este catálogo. Aprende pequeños secretos y trucos para mejorar el sabor de la carne.

Cerdo frito en sartén y más

Las recetas culinarias de cerdo frito, aunque numerosas, casi todas describen el mismo proceso, en un grado u otro. Para empezar, sofreír las cebollas en aceite en una sartén hasta que estén doradas. Luego se le añaden trozos de carne picados, sin películas ni venas. La carne de cerdo comenzará a soltar jugo, que hay que dejar hervir si se quiere conseguir una carne con una corteza crujiente. Es decir, hay que cocinarlo hasta que se haya evaporado todo el líquido de la sartén. Revuelva de vez en cuando, volteando los trozos. Puede taparlo con una tapa por un tiempo: la temperatura en el interior aumentará y el plato se cocinará más rápido.

Cuando no quede exceso de humedad en la sartén y la carne de cerdo tenga una hermosa corteza, todo estará listo; ya puedes servirlo de esta forma. O sufrir un poco más complementando el plato con otros productos. Por ejemplo, patatas, zanahorias, calabaza, otras verduras, champiñones. Además de salsa o gravy elaborado con pasta de tomate, crema agria o ambas.

Antes de freír, se puede marinar la carne para que quede más tierna, suave y jugosa. Cualquier adobo con vinagre, mostaza, mayonesa, vino, jugo, kéfir o cualquier otra cosa servirá. También puedes machacar ligeramente la carne de cerdo sin cortarla en trozos. Se puede hervir hasta que esté medio cocido.

Para mayor jugosidad, la carne se remoja en agua. O frótelo con aceite vegetal. Espolvorear con jugo de limón y dejar actuar media hora.

Consejo: la más jugosa es la carne de cerdo frita, que previamente se ha rehogado en una sartén muy caliente con revestimiento antiadherente y sin aceite. Se forma una ligera costra en la carne, que parece sellar los jugos del interior. Y debido a esto, la carne de cerdo finalmente quedará suave y tierna. Esta regla se aplica no sólo a las piezas de solomillo, sino también a las piezas con huesos, como las costillas.