Salar pescado en casa - 68 recetas de cocina

Salar pescado en casa puede ser tan sencillo que te sorprenderá. Un mínimo de esfuerzo y productos, y el resultado te agradará incondicionalmente. Lo más importante aquí es el tiempo. Por supuesto, la habilidad del cocinero no le afecta.

Salar pescado en casa

Salar pescado en casa es más fácil de lo que crees. Además, la mayoría de las recetas requieren sólo uno o como máximo dos ingredientes adicionales. Y esto es sal y agua. Pero en este caso hablaremos del método de salazón más simple, podría decirse, primitivo.

Existen diferentes recetas para salar pescado, que pueden contener otros ingredientes: aceite vegetal, azúcar, miel, pimienta molida, curry, ajo, cebolla, hierbas. Hay dos métodos principales: seco y húmedo. Al principio, para salar se utiliza una mezcla de especias secas y condimentos. Para el segundo - salmuera. En ambos casos es recomendable cortar el pescado en tiras, finas o ligeramente más gruesas. Aunque puedes salarlo entero si el pescado es pequeño (por ejemplo, anchoas).

Las recetas para salar pescado rojo son especialmente populares. Es más barato comprar crudo en la tienda que ya preparado. Además, la cocina casera garantiza el uso únicamente de aquellos productos que tú mismo elijas, sin productos químicos. El pescado salado comprado en la tienda puede contener componentes que son completamente inútiles (pero prolongan su vida útil).

El pescado se puede preparar salado o ligeramente salado, según su elección. Es mejor cortar las variedades comerciales valiosas de cierta manera para no estropearlas al final. El método popular es encurtir en un frasco de vidrio normal. El pescado se coloca en capas, rociando cada capa con una mezcla seca y espolvoreando con jugo de limón. Puedes agregar cebollas como última capa. Luego compacta todo, cierra y guarda en el frigorífico hasta por dos días.

También existe un método exprés para salar el pescado, que dura unas dos horas. Para ello, los filetes de pescado (preferiblemente rojos) deben congelarse en el congelador para luego poder cortarlos fácilmente en capas más finas. Cada capa no debe tener más de tres milímetros de espesor. Se colocan en un plato y se espolvorean con una mezcla de sal, azúcar y pimienta negra. Espolvorea con jugo de limón. Después de un par de horas, la merienda estará lista. Aquí el sabor depende completamente de lo fino que esté cortado el filete.