Mermelada de grosellas para el invierno. - 13 recetas de cocina

Esta baya es un relleno ideal para deliciosas tartas, especialmente las ralladas, una base para nata y un complemento para tortitas y tortitas. En verano se come crudo, se hacen compotas y gelatinas, y en invierno se prepara mermelada de grosellas según recetas caseras para estos fines.

Mermelada de grosellas para el invierno.

Esta maravillosa infusión dulce es valorada por su maravilloso almíbar de colores intensos (reemplazará cualquier tinte rosa violeta en la repostería) y sus bayas enteras (se usarán para pasteles y muffins, y para pasteles y bagels). Según la receta casera clásica, la cosecha debe lavarse y secarse. Y luego, un vuelo de fantasía. Uno de los métodos de cocción nos aconseja echarle almíbar hirviendo, dejarlo y escurrirlo varias veces. Otra es espolvorear con azúcar granulada, esperar el jugo y cocinar a fuego lento. El método de los cinco minutos utiliza los dos anteriores, pero con un breve hervor. Cuando la mermelada de grosellas está lista, se envía para su almacenamiento hasta el clima frío (o los resfriados de otoño). A veces se le ponen limones o naranjas. Luego se mezcla el aroma dulce, lo que añade variedad al estante de los tarros de grosellas y también a la mesa del té. También se está poniendo de moda hacer esta baya morada con berenjenas y nueces. ¿¡Inusual!? ¡Imagínate lo delicioso que es! La mermelada de cinco minutos se elabora con variedades rojas y blancas, a veces añadiendo gelatina o pectina.