Lubina - 13 recetas de cocina

La lubina tiene un sabor muy diferente al de la lubina de río o lago. Puedes prepararlo de diferentes formas: freír, guisar, hornear, hervir. La mayoría de las veces tiene un tamaño mediano, conveniente para servir en porciones.

Lubina

Hoy en día se conocen en la naturaleza más de cien especies de lubina. Este pez es muy diferente de sus homónimos de ríos y lagos, no solo en apariencia, sino también en sabor. Los expertos incluso lo clasifican como una familia e incluso un orden diferente. Es mejor no tocar la criatura marina con las manos desnudas: sus aletas son muy afiladas y, si las pinchas, las sensaciones dolorosas permanecerán durante mucho tiempo. El caso es que la lubina tiene glándulas venenosas. Pero no te preocupes en vano: están todos en las aletas. Y si los cortas, no pasará nada malo.

El tamaño medio de este pez es de 20 centímetros de longitud. Es decir, cabe fácilmente en una sartén estándar. Pero también hay verdaderos monstruos de las profundidades, cuyo peso alcanza los 20 kilos y una longitud de hasta un metro. Por cierto, estas criaturas marinas viven mucho tiempo, hasta cien años. La ciencia conoce un caso de longevidad cuando una de las perchas, Sebastes aleutianus, vivió 205 años.

Este pescado suele acabar congelado en las estanterías de nuestras tiendas. Su carne es blanca, con vetas rosadas, y su piel es de color rojo brillante. El único aspecto negativo es la presencia de una gran cantidad de semillas pequeñas. Pero si no les tienes miedo ni tomas las medidas adecuadas, entonces este problema se puede solucionar fácilmente.

Por ejemplo, la lubina se puede guisar hasta que los huesos se ablanden y se rompan fácilmente. Puedes picarlo en filetes junto con los huesos, haciendo chuletas. Puedes hervirlo y luego separar la carne y convertir el pescado en un delicioso paté. O incluso puedes encontrar alguna receta exótica para preparar lubina, por ejemplo, cruda o galantina.

La forma más cómoda de destripar, limpiar y cocinar una lubina de medio kilo. Lo mejor es comprar una carcasa ya destripada y sin cabeza. Muchos cocineros opinan que este pescado sabe mejor simplemente frito en harina en una sartén. Puedes servirlo con cualquier verdura.