Desde pequeña recuerdo cómo mi madre cocinaba en la cocina: sus aromáticos platos llenaban la casa de calidez y amor. Ella puso un poco de sí misma en cada bocado y eso me inspiró a seguir mi camino culinario. Me mudé a través de países y continentes, explorando cocinas que iban desde la pasta italiana hasta el curry indio. Para mí la comida no se trata sólo de gustos, sino también de tradiciones familiares que unen a las personas. Quiero demostrar que todo el mundo puede cocinar y hacer que la cocina sea accesible, inspirando la creación de platos sencillos y acogedores en cada hogar.
Me gradué de la facultad de Artes culinarias y hotelería en Vancouver Island University.