Costillas de cerdo ahumadas a la parrilla

Una receta sencilla para ahumar costillas de cerdo en el campo. Las costillas de cerdo ahumadas a la parrilla son un producto excepcionalmente sabroso. Se prepara de forma sencilla y con un mínimo de condiciones e ingredientes. Resulta mucho más sabroso que sus homólogos comprados en la tienda. Es rápido y fácil de preparar.
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Autora de la receta
Costillas de cerdo ahumadas a la parrilla
Calorías
654Kcal
Proteína
31gramo
Gorda
60gramo
Carbohidratos
2gramo
*Valor nutricional de 1 porción

Ingredientes

PorcionesPorciones: 5

Preparación paso a paso

Hora de cocinarHora de cocinar: 2 hora 40 minutos
  1. PASO 1

    PASO 1

    En primer lugar, debemos seleccionar costillas de cerdo frescas y limpias. Antes de salar, asegúrese de cortar todo el exceso de las costillas (trozos de grasa, carne fea que cuelga), retire la película natural; esto lo necesitamos para que las costillas queden bien saladas.

  2. PASO 2

    PASO 2

    Luego, corte la tira de costillas en varios trozos; esto le facilitará frotarlas con sal y especias. Empecemos a salar en seco. Primero, frote bien las costillas con sal por todos lados, luego con pimienta y condimentos. De esta forma, coloque las costillas en una bandeja de comida o en un recipiente esmaltado con tapa. Después de esto, coloque las costillas en el refrigerador durante la noche.

  3. PASO 3

    PASO 3

    Pasado el tiempo especificado, saca las costillas del frigorífico, enjuágalas bien para quitarles la sal y los condimentos con agua corriente y sécalas con una toalla seca o servilletas de papel. Las costillas están listas para ahumar.

  4. PASO 4

    PASO 4

    El proceso de ahumado se puede realizar tanto en un ahumadero improvisado como en un ahumadero especialmente diseñado para este fin utilizando aserrín de aliso. Nuestro vídeo muestra el proceso de ahumado en una cacerola de acero inoxidable.

  5. PASO 5

    PASO 5

    El proceso de ahumado en sí se lleva a cabo dentro de los 40 minutos desde el momento en que se fuma el aserrín, después de lo cual las costillas están listas para el consumo. Este plato se puede comer tanto frío como caliente. ¡Buen provecho!