Salteado de verduras - 8 recetas de cocina

Verduras salteadas, un plato aromático, apetitoso y luminoso para la temporada verano-otoño, que es un auténtico placer de preparar. Sobre todo si lo haces según recetas con fotos paso a paso de este catálogo. Elige cualquiera que se adapte a tus gustos y cocinemos juntos.

Salteado de verduras

Una variedad jugosa y sabrosa de verduras, fritas, guisadas o al horno, se llama saltear. Puede tener cualquier composición, textura, corte, presentación. Se utiliza tanto como plato principal independiente, como aperitivo, frío o caliente, y como guarnición de cualquier carne, ave, pescado, e incluso como ingrediente de otros platos más complejos. A las amas de casa rusas les encanta preparar verduras salteadas para el invierno.

Dependiendo de la temporada y la disponibilidad de productos, el salteado puede incluir absolutamente cualquier verdura: pimiento morrón, calabacín, berenjena, zanahoria, cebolla, tomate, pepino, hierbas frescas, especias. Dado que el plato gusta por su extraordinaria jugosidad y ligereza, se acostumbra prepararlo a partir de aquellas verduras que solemos comer para uso futuro. Esto quiere decir que las patatas no están incluidas en la composición original, aunque también existen recetas de verduras salteadas con ellas (aunque en muchas vienen como guarnición).

¿Qué es saltear? De hecho, este es un tipo de guiso. Debe su nombre a la palabra francesa saute, que significa salto. Se prepara no solo con verduras, sino también con carne, pescado, aves y champiñones. Una característica distintiva del plato es la presencia de la salsa en la que se sirve. Si la receta de salteado de verduras no contiene productos jugosos (es decir, no desprenden suficiente jugo), se le añade líquido. En la versión clásica suele ser vino, que se puede sustituir fácilmente por caldo o agua.

¿Existe alguna característica especial en la tecnología de preparación de salteados? Sí, lo son: por regla general, las verduras primero se fríen por separado en una pequeña cantidad de aceite en una sartén hasta que estén doradas. Y luego mezcle en un recipiente común y cocine a fuego lento hasta que esté completamente cocido. Generalmente hay suficiente jugo de tomate para formar la salsa deseada. Pero, como ya hemos dicho, puedes ayudar a que aparezca añadiendo, por ejemplo, un poco de Madeira.