Sándwiches para el desayuno - 101 recetas de cocina

Los sándwiches de desayuno se consideran especialmente valiosos si requieren un mínimo de tiempo para prepararlos y si el sabor y la presentación son óptimos. Hay muchos secretos para cocinar este plato súper rápido, que puedes conocer a continuación.

Sándwiches para el desayuno

Los sándwiches de desayuno más rápidos siguen siendo los llamados. frío, para cuya preparación no se requiere estufa, horno ni ningún otro equipo. Estas recetas son probablemente las más numerosas, ya que no están limitadas por nada. Para rellenar los sándwiches, puedes tomar lo que quieras, desde los tradicionales: salchichas, queso, mantequilla, hasta los más exóticos y caros, como camarones, aguacate, pescado rojo, caviar, piñas.

Traducido, la palabra sándwich significa algo así como pan y mantequilla. Pero con el paso de los años ha perdido su significado original, y hoy se utiliza para definir snacks fríos y calientes, tanto con pan con mantequilla, como sin estos dos productos. Por ejemplo, en lugar de pan puede haber: panes planos, bollos, pan de pita, pan crujiente, patatas fritas. Y en lugar de mantequilla: queso tierno, paté, pasta, mermelada o nada.

Un sándwich inglés clásico es un trozo de pan tostado en una tostadora con una fina capa de mermelada o confitura. En nuestro país, el más común es el pan con salchicha con la adición de otros ingredientes en diferentes variaciones: mantequilla, margarina, mayonesa, ketchup.

Si quieres preparar un sándwich caliente para el desayuno, puedes utilizar una sartén, horno o microondas. Para acelerar el proceso de cocción, conviene cortar los alimentos con antelación y guardarlos en una bolsa para poder utilizarlos inmediatamente cuando sea necesario. Generalmente puedes preparar los sándwiches con anticipación, luego congelarlos en porciones y recalentarlos en el horno. Hágalo de cualquier forma y tamaño, incluso de dos o cinco pisos))

Otra forma interesante de hacer bocadillos es esta. El queso, las salchichas, las hierbas, las verduras (tomates, pimientos morrones, cebollas, aceitunas) se cortan en cubos, se mezclan en una sola mezcla y se guardan en una bolsa sin sal. Cuando necesites preparar un sándwich para el desayuno, simplemente lo pones sobre trozos de pan y lo fríes en una sartén por ambos lados. Gracias al queso, la mezcla se pega a la miga. Esta ración también es buena porque al morderla el relleno no se cae ni se esparce en diferentes direcciones (sobre todo si lleva tomate).